01 octubre 2008

Rumble Fish (La ley de la Calle) o como la Ley de la Vida te cambia con los años.

Anoche no tenia sueño.
Estoy en plena gripe otoñal, y los antigripales me ponen como una moto, vieja, pero moto al fin al cabo.
Viendo la tele, y zapeando por los canales del satélite, había pocas opciones de película interesante a la vista a eso de las 12 de la noche.
El planeta de los simios, en versión nueva, sin el rey de la asociación del rifle, castaña a la vista.
Sin perdón, con uno de los mejores Clint, pero ya vista hace menos de una semana.
El profesor chiflado, con Eddie haciendo una vez mas todos los papeles de la película. La chica esta maciza, pero no como para tragársela de nuevo.
La ley de la calle. ¡Coño! esto me suena. ¿No era esa de macarrillas del Coppola? No, esa era la de Rebeldes, con el Cruise y compañía. Además esa la tengo en DVD y me parece bastante aceptable. Ah si!, esta debe ser esa otra de macarrillas también, la del Chico de la Moto. Jodo!, hace por lo menos 10 años que la vi.
Pulso el botón de +info, y confirmo que es la peli que pensaba, de Coppola, del año 83, por lo que hace mas de 10 años que la vi, por que no recuerdo haberla visto después de verla en cine. Recuerdo que cuando la vi, me pareció una buena película, con un toque maestro por aquello de rodarla en blanco y negro, imitando a los sueños aunque luego resulta que no es por eso, que hasta en algunos momentos te podías sentir identificado con algunos de sus protagonistas. Total, que me decido por ella, quedan un par de minutos para que empiece y es la mejor de las opciones.

Comienza la película.
Para el que no sepa de que va, no voy a contar el final, pero la historia es la de un muchacho, Rusty James, el cual es un jefecillo de pandilla en su barrio, no demasiado respetado por sus amigos, con un padre alcohólico, tarambanas en el instituto, una novia pija y con un hermano mayor, el celebre Chico de la Moto, al cual tiene como ídolo por haber sido el macarra mas macarra y matón en su momento. El va por el mismo camino que su hermano, pero este ha cambiado. Se ha dado cuenta que no puede seguir por ese camino, e intenta trasmitirle a su hermano que ese tipo de vida no lo llevara a un buen sitio, y que debe saber redirigir su destino.
Como antes comente, la película es en blanco y negro, pero porque se cuenta como la visión del Chico de la Moto de la historia y este personaje es daltónico, no diferenciando otros colores que no sean el blanco y el negro. Solo un toque de color en toda la película, la de los luchadores de Siam, peces luchadores hasta la muerte por la defensa de su espacio vital. ¿Un símbolo de esperanza en la búsqueda por un destino mejor? ¿Un símbolo del destino cierto de muerte que hay después de la lucha?

Bueno, no voy a profundizar mas en la simbología de la película, calidad de la dirección y demás leches de las que se pueda hablar. Pero si explicar el por que del titulo de esta entrada.
Al igual que en la película, uno de los sentimientos contradictorios que siente Rusty es su negativa y rebeldía a entrar en la edad adulta, no querer ver la vida con responsabilidades, derechos y obligaciones. Y, en mi caso, no ha sido igual ver esta película dos veces, con 25 años de transición entre los pases. Ha pasado de ser una gran película de la que tenia un buen recuerdo, y que en alguna ocasión he leído algo por la red sobre ella y su simbología como película de culto, a ser una película buena, de un buen director para mi gusto, pero algo lenta, sosa y salvo Rourke, que creo que esta muy bien en esta película, se me llegó a hacer un poco pesado llegar al final de la misma.


Imagino que es como todo en esta vida. Cuando tienes 20 años no se ve la vida como cuando tienes 45. La ley de la calle, o ley de vida que dicen.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Acertada observación. Los tiempos cambian que es una barbaridad. Un abrazo man.